“María” Rosalía, conocida formalmente como Rosalía Elena Taglialavore, fue una mujer argentina nacida el 30 de mayo de 1930 en Rosario, provincia de Santa Fe. Falleció en 2011, a los 81 años.

Es recordada principalmente como la madre de Luis Felipe Moyano (seudónimo Nimrod de Rosario, 1946-1996), el autor de obras esotéricas como El Misterio de Belicena Villca y Fundamentos de la Sabiduría Hiperbórea, y por sus propias afirmaciones de contactos extraterrestres y experiencias paranormales que influyeron en la doctrina gnóstica hiperbórea de su hijo.

A menudo se la llama "Rosalía 'María' Madre de Moyano" en círculos esotéricos, donde se la venera como una "Vraya" (sacerdotisa) o "Vocera de Agartha". Su vida es recordada cada año en conmemoración al arduo trabajo realizado en apoyo a su hijo (Nimrod de Rosario) y por los mensajes invalorables que canalizó de entidades superiores para el esclarecimiento de la humanidad, el más reciente 95º en 2025.

Para los racionalistas – escépticos su legajo combina elementos de trauma personal, abuso familiar y narrativas controvertidas de abducciones extraterrestres, que ella y sus seguidores integran en una visión conspirativa y espiritual. Lo cierto es que su historia es tanto o más creíble que la de los evangelios, actualizó el mito de la Virgen, concibió un niño prodigio por partenogénesis (sin contacto sexual), que mentó y plasmó la doctrina científico esotérica más grande de la historia.

Infancia y Juventud (1930-1945)

Hija de Elena Rondinone (1907-1946) y José Taglialavore. Rosalía creció en un entorno de pobreza extrema y traumas familiares en Rosario.

Fue una hija no deseada, resultado de una violación intrafamiliar (su madre fue abusada por su abuelo desde los 12 años), y su madre intentó abortarla sin éxito. Su infancia fue un "infierno": marcada por la tuberculosis terminal de su madre, ausencia paterna, maltratos físicos (golpes, encierros en gallineros, alimentación mínima como cebollas crudas), y un ambiente de incesto, extorsiones y denuncias policiales.

A los 4 años, fue dejada con su abuelo y abuelastra judía en Funes y Pergamino, donde sufrió abusos extremos, incluyendo rapado de cabello, siendo expuesta a un sin número de peligros. Rescatada por una vecina en 1938. Solo completó el segundo grado de escuela primaria, aprendiendo corte y confección en su adultez. Desde niña mostró habilidades como vidente y médium, invocando figuras como el "Maestro Jesús" para protección y experimentando visiones proféticas (por ejemplo, prediciendo inundaciones).

A los 13-14 años, rechazó pretendientes seleccionados por su madre moribunda, quien buscaba casarla antes de morir.

Matrimonio y Vida Adulta Temprana (1945-1960)

A los 15 años, (noviembre de 1945), su madre concertó un matrimonio forzado con Rubén Darío Moyano Cires de 27 años, perteneciente a una familia oligarca antiperonista, ligada a ingenios azucareros en Tucumán y con parentesco lejano a Julio Argentino Roca.

La boda fue caótica (civil y religiosa, con testigos improvisados y un cura rencoroso), y el matrimonio resultó abusivo: violaciones, maltrato, humillaciones y aislamiento en un caserón familiar en Villa Diego.

El entorno familiar (suegra y cuñados) la trataban como sirvienta, llevándola a atentar contra su vida e internándose en psiquiátricos voluntariamente para escapar.

Su madre falleció en 1946, poco después de la boda. Rubén murió en 1960 (infarto o posible asesinato político por deudas), dejando a Rosalía viuda a los 30 años.

Tras esto, se mudó con su hijo al centro de Rosario, trabajando en una panadería y en el sector gastronómico para sobrevivir.

Relación con su Hijo Luis Felipe Moyano y Afirmaciones Esotéricas

Rosalía es conocida por afirmar que su hijo Luis Felipe (nacido el 28 de octubre de 1946) no era hijo biológico de Rubén, sino un "híbrido mitad humano y mitad extraterrestre", concebido mediante abducción por partenogénesis (sin contacto sexual) por seres extraterrestres en febrero de 1946 (similar al relato bíblico de la Virgen María).

Durante el embarazo, sufrió maltratos físicos para hacerla abortar, pero ella afirmaba que el feto fue protegido por entidades extraterrestres que lo vigilaban. Luis Felipe creció en un ambiente hostil (ataques familiares, asma), pero fue un niño prodigio: egresó como técnico en electrónica a los 17 años, trabajó en empresas como Noblex y en la Antártida (1973-1975), investigando auroras boreales y acercamientos esotéricos con los antartes.

Rosalía lo protegió ferozmente, mudándose con él y compartiendo visiones; a los 14 años, él le confesó saber su origen extraterrestre y su "misión" de escribir sobre sabiduría prohibida.

Desde niña, Rosalía se describía como un ser contactado por extraterrestres ("Extras" o "Siddhas"), con abducciones consecutivas desde los 4 años, para salvaguardar su vida.

En 1945, fue llevada a una base en la Antártida, donde se reunió con un Adolf Hitler, que le mostró las "trampas del mundo" y la avaló para su misión como Vocera de Agartha.

Las abducciones continuaron, involucrando seres con trajes color manteca, manipulaciones craneales y advertencias sobre conspiraciones "sinárquicas" (judíos, masones, Nuevo Orden Mundial).

Documentó a pedido de los extraterrestres estas experiencias en 67 cartas que publicó en su página web junto a algunos de sus allegados, emergiendo al mundo los libros de su hijo: La Sabiduría Hiperbórea.

Vida Posterior y Legado (1960-2011)

Tras la “muerte” de su hijo en 1996 (que ella niega enfáticamente, afirmando que era un clon y que fue secuestrado), Rosalía promovió activamente su doctrina hiperbórea, usando redes sociales por orden de los “Extras” en su vejez para difundir los prodigiosos libros de su primogénito.

Convocó a sus seguidores de Internet que estudiaban la Sabiduría Hiperbórea a organizarse con personería jurídica para difundir la obra de su hijo y aguardar el encuentro con los iniciados de Felipe. Sólo los bolivianos acataron la directriz recibiendo su aval para continuar la difusión de la Sabiduría Hiperbórea.

Su legado es Trascendente: Admirada y venerada en círculos esotéricos y Veganistas por su rol en la Estrategia de los Dioses Liberadores.

Hoy, sus seguidores la honran como una figura profética, con comunidades en redes que celebran su contacto extraterrestre: EL MÁS IMPORTANTE DE LA HISTORIA.